Un hombre secuestrado hace 33 años encuentra a su madre con un mapa que dibujó de memoria

Abrazo.
Abrazo.
pxfuel.com
Abrazo.

Como si fuera una auténtica película de ficción, ha conmocionado a todos los usuarios la historia de un hombre que a sus 37 años ha podido llegar hasta su madre, tras pasar más de tres décadas desde que le secuestraron. Todo, gracias a un mapa de su pueblo natal de la provincia de Henan, en el este de China, que dibujó de memoria.

Li Jingwei tenía solo cuatro años cuando fue secuestrado fuera de su casa familiar en Yunan y vendido a otra familia a miles de kilómetros de distancia. Fue un vecino quien lo atrajo con un juguete y luego lo condujo 2.000 kilómetros hasta la provincia de Henan, donde lo vendió a una familia que lo educó y con la que creció desde el primer momento.

No está claro si alguna vez intentó huir, pero lo que sí se sabe es que pasó muchas noches recordando cómo eran sus padres y su casa, algo que le ayudó a reunirse con su madre 33 años después de su secuestro, tal y como ha explicado a The Paper

Inspirado por otros casos de personas que se reunieron con sus familias décadas después de haber sido secuestradas, Li Jingwei decidió que era hora de esforzarse más para encontrar a sus padres, porque se estaban haciendo mayores: "Me di cuenta de que no podía esperar más porque mis padres ya debían estar envejeciendo. Me preocupaba que, cuando supiera de dónde vengo, hubieran fallecido".

"Recordar la apariencia de mis padres y cómo era mi casa fue una rutina para mí durante un largo periodo de mi vida", explicó Li Jingwei, añadiendo que nunca pudo memorizar el nombre de su pueblo.

Y así fue cómo empezó por proporcionar una muestra de sangre a la policía, para ir aportando rasgos del pueblo en el que había nacido. Acabó dibujando a mano unos mapas que luego colgó en Internet, preguntando a la gente si reconocía el trazado y dónde podría estar ubicado.

Los planos de Li se hicieron virales, ya que la gente conoció su historia y expresó su asombro por lo detallados que eran sus dibujos. Incluían el diseño de las casas tal y como él las recordaba, e incluso grandes cubos de madera en los que se cocinaba el arroz.

Mientras la información era facilitada por diversos usuarios, la policía pudo reducir la búsqueda a Zhaotong, un pueblo montañoso de la provincia de Yunnan. Las autoridades llegaron al caso una mujer de la zona que había perdido a su hijo en la misma época en que Li Jingwei fue capturado, y una prueba de ADN demostró que era realmente su madre.

Estaba previsto que se conocieran en persona el 1 de enero, pero, por desgracia, Li no pudo volver a ver a su verdadero padre, ya que había fallecido hace algunos años. 

En una transmisión en vivo desde la comisaría china de Lankao (Henan), se vio cómo madre e hijo se abrazaban y lloraban, en compañía, además, del hermano y la hermana menores de Li Jingwei. "Finalmente encontré a mi bebé", repetía la mujer, emocionada.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento