Entre 1978 y 1991, Jeffrey Dahmer asesinó a 17 hombres y adolescentes y cometió con ellos canibalismo, necrofilia y otras atrocidades con sus cuerpos. Por su parte Ted Bundy confesó 30 asesinatos de mujeres, aunque el FBI le probó 36, entre 1974 y 1978. 

Ambos terribles historiales fueron suficiente para que Britnee Chamberlain, una australiana de 28 años, se haya tautado enormes retratos de ambos asesinos en su cuerpo, en lugares tan visibles como el muslo y el gemelo. 

La joven no sólo se ha tatuado sus caras, también algunos de sus preceptos, como una frase de Dahmer que dice "Si no puedes vencerles, cómetelos". 

La joven explicó a Daily Star que para ella tiene tanto sentido como la gente que se tatúa a "su mascota, las iniciales de un ser querido o una broma tonta". 

Britnee, de Sydney, está tan obsesionada con los asesinos en serie que la inspiraron a estudiar psicología forense y son sus motivaciones lo que la obsesiona hasta el punto de llevarlos tatuados en la piel. 

"No apruebo los crímenes de los asesinos en serie de ninguna manera, simplemente estoy intrigada con por qué lo hacen", expliaba la joven, que ahora planea hacerse otro tatuaje con la efigie de Jack el Destripador.