Ya es oficial, el espantapájaros más terrorífico de todos no es el de la película Jeepers Creepers, sino estos dos lobos robóticos instalados en la ciudad japonesa de Takikawa para ahuyentar a los osos.
Este municipio al norte de la isla de Hokkaido ha colocado dos monstruosos robots con forma de lobo en los campos cercanos a la ciudad para asustar a los animales que se quieran acercar, y parecen estar funcionando.
Tienen un metro de alto, colmillos y un gran cuerpo peludo y tienen sensores infrarrojos incluidos. En el momento en el que el falso animal detecta un oso, empieza a hacer fuertes ruidos y mover la cabeza con sus ojos rojos iluminados.
クマ撃退にオオカミの形の装置 北海道 滝川市が本格導入検討https://t.co/QdqdoLdTOE#nhk_video pic.twitter.com/c4gMFdFmKs
— NHKニュース (@nhk_news) October 19, 2020
La compañía encargada de este invento e Ohta Seiki, quien vendió unas 70 unidades en los últimos dos años, tal y como confirmó a ABC News. "Su diseño incluye muchos métodos para ahuyentar a los osos, creo que será efectivo. Si sirve para crear un buen ambiente para los osos y para que las personas puedan vivir, estaré contento", declaró Yuji Ohta, el presidente de la empresa.
Estos dos ejemplares fueron instalados en septiembre y son una buena opción para mantener a los osos lejos, en lugar de optar por perseguirlos o matarlos como hacen muchos. Y es que en esta zona los avistamientos están siendo más numerosos que en cinco años, con docenas de ataques.
【動画あり】オオカミ型ロボット「モンスターウルフ」 効果が証明され本格導入へ 設置中の食害はゼロhttps://t.co/QNrPW9V4jl
— sakamobi.com (@sakamobi) March 21, 2018
想像以上に怖かった…(；ﾟДﾟ) pic.twitter.com/bMGzSFNElJ
Por ello, Takikawa, que tiene 41.000 habitantes, decidió instalar estos lobos, ya que estaban viviendo un aumento de apariciones de osos por la zona, los cuales se vuelven más peligrosos cuando buscan comida. De hecho, ha disminuido la recogida de bellotas y nueces, por lo que es evidente que se acercaban para alimentarse con ellas.
Los robots emiten hasta 60 sonidos diferentes entre los que se incluyen voces humanas, disparos o aullidos y ladridos de lobo. De este modo, los osos no se acostumbrarán a la presencia de los robots. Y parece estar funcionando, pues desde su instalación no ha vuelto a haber ningún encuentro, por lo que ahora la ciudad está pensando en distribuir más lobos por la zona.
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