Ella iba a ver con su novio La Bella durmiente al cine, su película favorita y uno de los clásicos de Disney. Lo que no se imaginaba es que la película terminaría con ella misma de protagonista, convirtiéndose en la princesa y con su pareja pidiéndole matrimonio cual príncipe azul.

Con la sala llena de gente, en el momento más característico de la animación, cuando el príncipe va a despertar a la princesa con un beso, los personajes alteran de repente su apariencia adquiriendo, también de forma animada, un gran parecido con la pareja real, lo que provoca una extraña reacción en Sthuthi David, la afortunada de esta historia, que no entiende qué pasa.

Además de su apariencia, también el guion cambia: el príncipe saca un anillo de compromiso y lo lanza a través de la pantalla, cayendo en las manos de su chico, Lee Loechler, que se arrodilla para hacerle la gran proposición.

Ella no se cree lo que está pasando y se da cuenta de que todos los asistentes son familiares y amigos que han querido participar en un momento tan especial para la pareja. 

Es entonces cuando Loechler se dispone a hacer la pregunta, con su toque personal de cardiólogo: "Te quiero con todo mi corazón, ventrículos, arterias y válvulas incluidas. ¿Vivirías felizmente para siempre conmigo?". "Sí", responde ella inmediatamente emocionada entre vítores de los presentes.

La película, entre tanto, continúa celebrando la respuesta de la mujer: "Pensaba que había algo mal en la película", reconoce aún sin creerlo. Ella, sin haberlo imaginado, se había convertido en la protagonista de su animación favorita.