Cualquier postre que lleve chocolate suele triunfar en las comidas y cenas navideñas, sobre todo si es de chocolate blanco. La mousse es un plato típicamente francés que se ha convertido en todo un clásico en nuestras mesas por su exquisita textura.
Así, para los más golosos de la casa, esta mousse de chocolate blanco, que se puede acompañar de frutos secos, de crujiente de galleta o de cualquier otro topping adicional es perfecta para sorprender esta Nochevieja.
Receta de mousse de chocolate blanco
INGREDIENTES
250 gramos de chocolate blanco
200 ml de nata para montar
4 huevos
30 gramos de mantequilla
50 gramos de azúcar (opcional, porque el chocolate ya lleva azúcar)
80 gramos de galletas (opcional, para decoración)
ELABORACIÓN
- Corta el chocolate blanco y fúndelo al baño maría junto con la mantequilla. Otra opción si no dispones de mucho tiempo es hacerlo en el microondas.
- Separa la clara de los huevos de las yemas y guarda las claras.
- Añade las yemas a la mezcla de chocolate blanco y mantequilla fundida (cuando haya enfriado un poco).
- Monta la nata en otro recipiente con las claras. Un truco muy sencillo es utilizar varillas eléctricas, ya que quedará al punto de nieve.
- Si utilizas azúcar, ve echando poco a poco conforme vas moviendo con las varillas la nata.
- Deja la nata montada en el frigorífico para que enfríe.
- Ve añadiendo la nata montada a la mezcla de chocolate fundido, poco a poco, para que se integre correctamente.
- Coloca la mousse en pequeños recipientes para los comensales. Puedes añadir trocitos pequeños de galleta por encima para decorar.
- Deja enfriar en la nevera, al menos, un par de horas antes de servir.
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