Con los espárragos trigueros hay cierta confusión. Los verdaderos trigueros son espárragos salvajes. Es decir, aquellos a lo que damos ese nombre y compramos en la frutería de la esquina o en el súper son en realidad espárragos verdes.
El triguero es una variedad de espárrago verde más fina que crece de forma silvestre, mientras que el espárrago que compramos es una variedad procedente del cultivo. Si en todo caso queremos salir al campo y encontrar trigueros será al comienzo de la primavera cuando más fácil nos va a resultar.
Unos y otros son muy saludables. Tienen un alto contenido en fibra, por lo que son estupendos para combatir el estreñimiento y regular el tránsito intestinal. Además, son bajos en calorías y ricos en vitaminas y minerales.
Los espárragos verdes son ya un habitual de nuestra dieta. De hecho, lo raro es encontrar y comprar espárragos blancos frescos: son caros y poco frecuentes (nos quedan las latas como consuelo).
Los verdes o trigueros son muy versátiles. Pero la plancha les sienta muy bien, como en esta receta de espárragos trigueros con gambas por menos de 3 euros (precio por persona aproximado).
Espárragos trigueros con gambas
Ingredientes
Espárragos verdes (2 manojos): 4 euros (manojo 200 gr, 1,99€)
Gamba pelada congelada (400 gr): 7 euros (el kilo a unos 18€)
Puerro (1): 0,80 euros
Hierbas aromáticas (perejil, albahaca, tomillo, etc)
Aceite de oliva
Sal
Pimienta
OPCIONAL: 1-2 dientes de ajo, huevos...
Elaboración
Las gambas las ponemos a descongelar en la nevera el día anterior.
Troceamos los espárragos, quitando la parte dura.
Pelamos y cortamos el puerro en rodajas, descartando lo muy verde.
Si optamos por el ajo, lo fileteamos y lo echamos en una sartén al fuego con un poco de aceite.
Cuando coja color, añadimos el puerro. Mezclamos bien.
A continuación echamos los espárragos y salteamos hasta que se ablanden.
Agregamos las gambas peladas. Salpimentamos y salteamos durante 3-5 minutos.
Con las gambas doradas, añadimos las hierbas aromáticas.
OPCIONAL: si lo quisiéramos como revuelto, sería el momento de añadir los huevos.
Salteamos un minuto más y servimos.
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