Zidane, sin más. Ese es el nombre del encuentro entre el Madrid y el Villarreal.

Y es que se despide del Santiago Bernabéu uno de los mejores futbolistas de todos los tiempos y el, dicho por muchos, mejor jugador que ha vestido la camiseta blanca junto a Alfredo Di Stéfano.

Al francés aún le quedará el partido contra el Sevilla de la última jornada, pero en casa y ante su público de los últimos cinco años quiere despedirse con victoria.

El Bernabéu, que se llenará a reventar para despedir a Zidane, le tributará una gran ovación con un gran mosaico con la camiseta del cinco, aunque no se le dará ninguna placa especial antes del encuentro debido a la importancia de los tres puntos.

Una victoria necesaria

Una vez recuperado el segundo puesto en la última jornada de Liga contra el Racing, aventajan en un punto al Valencia y son conscientes de que todo lo que no sea conseguir dos triunfos les complicaría mucho el objetivo.

Para este partido, Juan Ramón López Caro recupera a Iker Casillas en la portería, tras cumplir un partido de sanción contra el Racing, y a Antonio Cassano y Julio Baptista, quienes han superado sus respectivos problemas físicos.

Ronaldo no juega

Ambos empezarán el partido casi con toda seguridad desde el banquillo. Mientras, Ronaldo sigue sin entrar en una convocatoria tras su lesión y no podrá despedirse esta temporada del madridismo antes de viajar al Mundial de Alemania.

Con la presencia segura de Zidane en su despedida, Raúl actuará de delantero centro, mientras que Robinho lo hará de segunda punta.

El Villarreal viaja con todos sus efectivos y con el objetivo de lograr su primera victoria frente al conjunto madridista, un triunfo que además le dejaría, a falta de la última jornada, con opciones de alcanzar la competición europea.

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