Cristian Pérez es uno de los exponente de este deporte en nuestro país. Nació, por avatares laborales de su madre, en Madrid hace 22 años. A los seis se trasladó a la cuna familiar, Vigo, y aquí encontró el body o bodyboard.

 

No hay edad para iniciarse, «pero cuanto antes se suba un niño a la tabla, mejor: 5 ó 6 años como límite inferior; y 45-50 como máximo», recomienda Pérez.

 

Como deporte minoritario, la mayor preocupación es conseguir vivir de él. El de Madrid se queja de que «el apoyo público dura el avance de un telediario. Un año te lo dan y al siguiente, no. De donde más se saca es de los patrocinadores». «Sólo debes participar  en los torneos que dan dinero. Al final, se trata de invertir lo que ganas en ti mismo». Pérez acaba de conseguir la cuarta plaza en los Mundiales de Sintra (Portugal).

 

 

¿Y por qué gusta tanto el body? La velocidad y los trucos aéreos que posibilita la tabla corta aún te permiten pensar. Según Pérez, «en mejorar, en desconectar, en divertirte, en hacer ejercicio».
Otros nombres destacados del body español son los vascos David Pérez, Eunate Aguirre y la canaria Marina Taylor, lo que demuestra que pueden practicarlo tanto hombres como mujeres.
 Próxima entrega: 2. Kayak polo

 

 

1¿Invierno o verano? En las dos estaciones. En invierno más olas, en verano más gente.

 

2¿Equipo económico? Es un deporte para clases medias. Por 400 euros tienes aletas y traje de neopreno.

 

3¿Peligros? Las rocas y el coral.

 

4¿Sólo o en compañía? Es más divertido ir con toda tu gente.

 

5¿Lugar más espectacular para practicarlo? Las olas descomunales de Pipeline, en Hawái.

 

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