El Real Madrid inició el año con tropiezo al empatar anoche en Villarreal en el partido de Liga aplazado en su día por el Mundial de Clubes. El punto no ayuda a los blancos a acercarse al liderato –se quedan a 7 puntos del Barça– y saca al Villarreal de los puestos de descenso.

Solari volvió a apostar por su BBV en ataque –Bale, Benzema y Vázquez– y de nuevo sentó en el banquillo a Isco, para quien poco parecen haber cambiado las cosas con el año nuevo. En el centro del campo regresó Casemiro junto a Modric y Kroos; y en defensa formaron Carvajal, Ramos, Varane y Marcelo. Por su parte, el Villarreal, que recibió al Madrid con pasillo de campeón entre pitos de la grada, salió con Gerard Moreno como único punta y un esquema muy defensivo, pero solo sobre el papel porque tras el pitido inicial se lanzó al ataque ante un rival todavía en fase de calentamiento.

Así, a los tres minutos Courtois tuvo que sacar un pie milagroso para evitar el tanto de Chukwueze y un minuto después Cazorla adelantó a los amarillos ajustando su disparo al palo. De nuevo la jugada la había iniciado el nigeriano Chukwueze, un dolor de cabeza para Marcelo en esos primeros compases.

Pero fue a partir del gol encajado cuando el Madrid se enteró, por fin, de que el partido había comenzado, pues solo tardó un par de minutos en neutralizar la ventaja. Lucas Vázquez recibió un balón de Carvajal en el área y su centro preciso lo cabeceó a la red Benzema.

Frenético había sido el arranque del partido, pero poco a poco el equipo de Solari incrementó su dominio del balón y al cuarto de hora Vázquez, magistralmente asistido por Benzema, tuvo el segundo en sus botas, pero Asenjo lo evitó. Sí lo encontró Varane al cabecear una falta colgada al área por Toni Kroos (min 20). El Madrid le había dado la vuelta al marcador.

Cuando moría el primer tiempo, en el que hubo un gol bien anulado a Modric, se lesionó Bale (otra vez) y en la segunda pare Isco sustituyó al galés. Pero el color del partido cambió sustancialmente porque el Real Madrid perdió el control del juego y empezó a sufrir las acometidas de un Villarreal necesitado de puntos. Jugó con fuego el equipo de Solari durante muchos minutos, demasiados, y lo acabó pagando en el minuto 82 cuando Cazorla, que poco antes había avisado con un disparo ligeramente desviado, cabeceó el 2-2 definitivo. Doblete y gran noche la del veterano jugador asturiano.