El acierto en el tiro de tres (44 % de acierto, 12 de 27 lanzamientos) dio ayer al Granada su primera victoria en Manresa (74-76) ante un Ricoh que tuvo dos ausencias importantes Josh Asselin y Matt Walsh. Aún así, los catalanes supieron neutralizar a Curtis Borcharadt, que sólo anotó cinco puntos y fue eliminado por cinco faltas personales.

El CB tuvo que recurrir a los lanzamientos desde más allá de los 6,25 metros desde el salto inicial, ya que el Manresa presionó fuerte en defensa dentro de la zona. El marcador lo abrió Gianella –cómo no– desde el triple. Después de un primer cuarto muy igualado, los granadinos no fueron capaces de aprovechar el bajón de juego del equipo local para abrir una brecha definitiva en el luminoso.

Tras el descanso, el Manresa pensó que podía remontar, pero tres triples consecutivos del CB fulminaron esa esperanza.

En los últimos diez minutos, los hombres de Sergio Valdeolmillos estuvieron acertados y, con siete puntos de inicio, lograron la máxima diferencia del encuentro (53-66, min 33).