Barcelona y Valencia protagonizaron un intenso partido en Mestalla.

Una primera parte para olvidar dio paso a una segunda cargada de acciones y goles, y en la que el Valencia 'se comió' al Barcelona.

Floja primera parte en términos generales.

El Valencia hizo lo que tenía que hacer. Salió eufórico y ahogó al Barcelona en su línea de medios, presionando lo más arriba posible.

Y le salió bien. Los culés apenas tuvieron ocasiones de gol.

En estos primeros minutos, el equipo de Quique no se desentendió de la portería de Valdés, y fue cuando llegó la mejor ocasión: Villa tiene un mano a mano pero Valdés le gana la partida. Era el minuto 7.

A partir de ahí, el Barça dominó por completo el tempo del partido. El Valencia, a la contra.

El resultado fue un partido que bajó en calidad y ritmo y se quedó sin ocasiones de gol. Como prueba, un boton: primer tiro del Barcelona entre los tres palos fue de Deco en el minuto 40.

En la segunda mitad, el guión cambió

Los dos equipos buscaron con más ahínco la portería rival tras la reanudación, conscientes de lo impotante de una victoria. Pero fue el Valencia quien castigó el mal juego blaugrana. En 3 minutos locos (del 51 al 54) el Valencia dejaría finiquitado el encuentro, puesto que el Barcelona no estaba para muchas florituras.

Poco después llegaría la jugada más polémica. Albelda entró con mucha dureza a Messi, y Deco llegó después para tomarse la justicia por su mano. Empujones y tangana que acacaron con la expulsión de Albelda y Deco.

A raiz de esa acción, el partido se volvió bronco y huérfano de fútbol.

Al final, Ronaldinho, en su tercera falta, marcó el gol que ponía la incertuidumbre en Mestalla. Pero ya era demasiado tarde.

El Barcelona cae derrotado en Mestalla y la Liga se pone más interesante que nunca.