España, vigente campeona del mundo de balonmano, cumplió ayer sin esfuerzo el trámite de ganar a Qatar en su segundo choque del Mundial de Alemania y se dio un atracón de goles que dejó su quinta máxima goleada en un mundial (23 goles de diferencia).
Ante la perspectiva de un entrenamiento con árbitros, el técnico español, Juan Carlos Pastor, no convocó ni a Iker Romero ni a Rolando Uríos, y Alberto Entrerríos, en el banquillo, no jugó un minuto.
La confirmación de esta victoria segura se hizo esperar sólo nueve minutos, instante en el que España se situó 0-6. Para después quedaron los 11 goles de Juanín García y el debut del jovencísimo Víctor Tomás (21 años).
España se jugará hoy con la República Checa el pase como primera de grupo a la segunda fase del mundial.
* España-República Checa; hoy, 20.00 h; La 2.
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