Sevillano de nacimiento y con su corazón siempre puesto en la música, el cantante ofreció una velada repleta de baile, risa e idílico ambiente. Recopiló algunos de sus mejores temas para la noche más esperada por parte de los amantes de la música en directo, temas como 'Déjate querer', 'Por ella' o 'Algo contigo', versionada junto con una artista invitada, fueron los emblemas de la noche.

Soto, tan simpático y cercano como lo recordábamos, compartió vivencias de su infancia con un público entregado que no le dejaba marcharse del escenario. Hubo tiempo para hablar de sus hijos, los amores de verano cuando sólo era un crío o sus primeros pasos en este mundo para el que estaba predestinado, la música.

Sus comienzos fueron como los de cualquier muchacho que anda siempre con guitarra en mano, veranos en las playas de El Puerto de Santa María, corros de amigos cantando mientras él tocaba, una voz romántica con ansia de componer, José Manuel Soto daba sus primeros pasos. El concierto finalizaba con una de sus insignias, 'La pared', donde el público no dudo en levantarse y comenzar a bailar.

Como anoche decía el artista: "¿Qué habrá más bonito que un concierto por una buena causa, donde la música y la buena voluntad de las personas triunfa?". José Manuel Soto junto al grupo musical A dos velas se unían para poner voz a una buena causa, recaudar fondos para el centro de hipoterapia de la Fundación Santa María Polo. Centro que se encarga de ayudar, a través de tratamientos de equitación y contacto con el caballo, a niños con discapacidades. La directora técnica del mismo subía al escenario para agradecer la presencia de todos esa noche.

Una extraordinaria velada celebrada en este 45º Torneo Internacional INDI de Polo en la que no faltó el ritmo y el buen ambiente, y donde tuvimos la oportunidad de volver a ver cantar juntos a José Manuel Soto y A dos velas.