El Real Valladolid no tiene margen de error si quiere seguir la próxima temporada en Primera División. El club castellanoleonés afrontaba este domingo su primera 'final' ante el Athletic de Bilbao y cumplió con creces gracias al golazo de Waldo, pero la motivación también fue un elemento clave.

En esta batalla contra el descenso entran muchos factores en juego. No sólo hace falta que el equipo, los jugadores y técnicos, estén todos a una, sino que también todo el entorno les aúpe. Es lo que han hecho las esposas y novias de los futbolistas.

Antes del encuentro contra el Athletic, y sin que sus parejas lo supieran, se metieron en el vestuario del Nuevo José Zorrilla para colgar en sus respectivas taquillas fotos, mensajes, frases y todo elemento motivador que pudiera venirles bien a los suyos. Cuando los jugadores pucelanos fueron a cambiarse para ponerse el traje de faena, se encontraron con la sorpresa.

La emoción con la que recibieron la sorpresa fue notable, y les vino bien, como demuestra el resultado que obtuvieron ante el Athletic.