No he hecho nada que no pueda hacer cualquier corredor popular de maratón.

¿Es consciente de su hazaña?

Lo que quiero es que lo que he hecho sirva para algo, como para que se conozcan los límites de la resistencia física humana y que casi siempre se puede realizar cualquier cosa que uno se proponga.

¿Bajar de las tres horas no es una animalada?

Nunca fui a tope ni puse en riesgo mi salud. Mi principal ilusión era superar el reto, y si hubiese forzado, habría sido imposible. Por otro lado,  bajar de las tres horas lo hacen todos los maratonianos cada día de entrenamiento.

¿Se sometería a analítica?

Y a cualquier control, no tengo nada que ocultar. No tomo ni vitaminas específicas.

¿Dónde sufrió más?

Siempre sentí el aliento de los que me han apoyado en esta aventura. Me lo he pasado de maravilla en todas las etapas, pero el final, en Barcelona, resultó especial.

¿Qué le dicen en su casa?

Mis padres están acostumbrados a mis locuras deportivas, pero mi mujer dice que con 50 años va siendo hora de que siente la cabeza y pase más tiempo en casa con ella y nuestros hijos.

¿Pide permiso en el trabajo?

Las etapas las acometí los fines de semana. No tengo patrocinador ni apoyo alguno.

¿Cuál será su próximo reto?

Estudio la forma de repetir la hazaña corriendo un maratón en cada país de Europa.

Bio

Nacido en 1955 en Otxaran (Vizcaya), este seguidor del Athletic ha completado 1.054,875 km en los 25 maratones. Está casado, tiene dos hijos y trabaja en una empresa de material sanitario. Practica ciclismo y fútbol sala.