El drama de la desaparición de un niño de cuatro años el pasado domingo, en una playa del norte de Portugal, se extendió al fútbol cuando fue conocido que era sobrino del internacional portugués Simao Sabrosa, futbolista del Atlético de Madrid.

El diario A Bola publica hoy un relato detallado de los hechos, que comienza con el traslado de la familia de Simao, su hermano Serafim y la esposa, Bernardete, a un hospital de Oporto, donde se encontraba la madre del futbolista, operada de una rodilla.

Día de sol que invitaba a la playa, Serafim decide llevar a su hijo, junto a otros cuatro amigos pequeños, a la playa de Quebrada (norte).

Los cinco niños jugaban cuando una ola gigantesca les arrastró a y Serafim se lanzó al mar. Consiguió salvar a cuatro, menos a su hijo, Diogo.

Las imágenes de la televisión mostraron a Simao y a los padres del niño Diogo con rostros tristes y apesadumbrados, atendidos por una psicóloga de los servicios de emergencia médica.

La búsqueda del cuerpo de Diogo prosiguieron hoy, martes, por aire, mar y tierra.

Las autoridades consideran dos teorías: que el cuerpo se encuentra atrapado en rocas cercanas a la playa, o que ya fue arrastrado más al sur.