Sergio Ramos se dio un baño de masas durante su visita a la prisión de Alcalá-Meco, en Madrid. Allí, habló para los internos, en un encuentro promovido por la Fundación Real Madrid e Instituciones Penitenciarias.

Entre otras cosas, comentó sentirse "orgulloso" de que le comparen a Paolo Maldini (defensa del Milan) y aseguró que trabaja "cada día para intentar parecerme un poquito a él". Además, recalcó su deseo de seguir en el club blanco: "Tengo seis años por delante y ninguna intención de salir".

En un ambiente distendido, los asistentes quisieron saber más sobre el futuro de Ramos y le preguntaron por una eventual oferta del Milan, de la que dijo no saber nada, y por un posible final feliz en el Sevilla, a lo que contestó: "Siempre se piensa en volver a casa, pero el Madrid me lo ha dado todo".

Sergio Ramos respondió con gusto a todas las preguntas que le fueron planteadas, incluso sobre su aspecto. "Si las cosas se dan bien, después de la Eurocopa me cortaré el pelo", aseguró para el regocijo de los presentes.

El futbolista dio ánimos a los internos: "con sacrificio y mucho esfuerzo hay que intentar conseguir el sueño que uno tiene. A mí se me cumplió".