Hacía años que los ingleses ansiaban un héroe en la Fórmula 1 que hiciera sonar su himno una y otra vez y que llevara la bandera británica por todos los rincones del mundo. Con Jenson Button parecía que el sueño de tener un sucesor del campeón Damon Hill (1996) estaba en marcha, pero el de BAR-Honda no ha pasado de ser un secundario.

Por eso, el domingo, con la primera victoria en un GP de Lewis Hamilton, que además se convertía por segunda vez en líder del Mundial, los ingleses se han visto ya campeones. Ayer ya hablaban del Rey de la carretera y nuevo héroe británico (The Times) o del Rey Lewis I, título que le otorgaba el Daily Mirror, quien destacaba que el que hizo «crack» ante la presión «fue el español Alonso».  

Pero los británicos no se limitan a ensalzar a su nuevo «superderportista», sino que han pasado a ridiculizar a su compañero en McLaren-Mercedes, Fernando Alonso. Un cronista de The Guardian se compadecía («pobre Alonso») y lo compara con la reina de corazones del libro Alicia a través del espejo: «Más rápido, más rápido», le decía la reina a Alicia, «y a pesar de su rapidez, nunca parecía adelantar a nadie».

Kubica, dado de alta, aún no sabe si correrá el domingo en Indianápolis

Sólo una contusión en el tobillo. Después de que su  brutal accidente en Canadá hiciera temer lo peor, el piloto polaco Robert Kubica fue dado de alta ayer del hospital en el que se hallaba ingresado. Únicamente padece una fuerte contusión en el tobillo izquierdo y no presenta fractura alguna, como al principio se temía. «He tenido mucha suerte», dijo el polaco.

Kubica sólo tiene en mente ahora participar el próximo domingo en el Gran Premio de Estados Unidos, que tendrá lugar en el circuito de Indianápolis. Aunque parece que sí podría estar, el equipo BMW no anunciará hasta el jueves si Kubica participará en la carrera. En el caso de no estar en condiciones de correr en Indianápolis, Kubica sería sustituido por el alemán Sebastian Vettel, piloto de pruebas y de reserva de BMW Sauber.

Dedicatoria de Heidfeld

«Fue un accidente espectacular y me puso la piel de gallina cuando lo vi», declaró su compañero de equipo Nick Heidfeld, segundo en la carrera y que le dedicó al polaco su podio en Canadá. Fue el gran premio más accidentado en mucho tiempo.