Míchel Salgado, lateral derecho del Real Madrid, ha sido el primer madridista perteneciente al club en desmostrar su descontento por la celebración de la Copa del Rey en el Santiago Bernabéu en la que se perfila que jugará el Barcelona, lo que considera una "provocación".

"Lo que no hay que hacer en la vida es provocar a la gente y hay más estadios. Es como si nosotros vamos a jugar una final al Camp Nou. No sería positivo", manifestó.

El pasado fin de semana se vieron en las gradas del Santiago Bernabéu pancartas en contra de esta decisión de la Federación Española de Fútbol.

Ha dicha final optan el Barcelona, el Getafe, el Sevilla y el Deportivo de La Coruña.

No quiere hacer cuentas

Respecto a la Liga, Míchel Salgado reconoció que "después de lo que hemos pasado, estar con opciones, hace que ésta sea una Liga muy especial. Hemos sido fuertes tras aguantar muchos palos. Hemos sufrido mucho y por eso ahora disfrutamos más que nunca. Para mí sería la Liga que más iba a disfrutar", explicó.

Y aunque reconoció que evita hacer cuentas. "Mis números pasan por pensar en nosotros, ganar al Espanyol y ser líderes al menos una noche". Está convencido de que la clave de la Liga estará en la visita del Barcelona al estadio Vicente Calderón.

"No hay que primar al Atlético de Madrid. En absoluto. Se juega algo más que dinero, sus opciones de ir a Europa. Confío en eso y en sus jugadores, así que no dudo que saldrán a muerte. También por prestigio", manifestó.

Además, mandó un mensaje a su eterno rival. "El Barcelona sabe que cuando el Real Madrid está ahí, todo le es más complicado. Es un sentir mutuo. Ahora entramos en una pelea encarnizada en la que nosotros vamos hacia arriba, porque esta temporada ya tocamos fondo, y ellos que iban a ganar todo, ahora no lo ven tan claro. Hay que aprovecharse también de su situación", consideró.