Los gestos de dolor mezclados con su eterna sonrisa sucedieron al impacto.
El ejercicio obligaba a cada jugador a estirar al máximo la cinta de hule antes de soltarla de su cintura y emprender una carrera entre varios obstáculos intercalados fijados al frente.
Fue la actividad que concentró la mayor parte del tiempo del entrenamiento, el primero de Brasil en Koenigstein que se registró con un agradabilísima temperatura de 23 grados.
Tras el impacto, Ronaldinho caminó algunos pasos frotando con ansiedad su parte que menos recibe sol y a continuación, sin mucho pudor pero escudado por algunos compañeros, levantó un poco su camiseta y bajo "a media asta" su calzón para verificar si todo estaba en orden.
Ronaldo estaba riéndose al lado como espectador, a Robinho atrás como auxiliar del examen y a Zé Roberto un poco más distante, atento al procedimiento.
El incidente con el elástico que pone a prueba la potencia de los jugadores llevó a uno de los médicos de la selección a aplicar una especie de crema en las nalgas del célebre jugador y a ofrecer a continuación un masaje.
El rostro relajado de Ronaldinho Gaúcho confirmó el alivio y minutos después se reintegraba a la exigente dinámica programada hoy para los jugadores.
NOTICIAS RELACIONADAS
- Ronaldo y otros brasileños en la discoteca hasta las seis de la mañana
- Ronaldo está listo para el Mundial, "sin duda"
- Sócrates: "Brasil no ganará; hay intereses de por medio"
- Brasil se da un festín a costa de Nueva Zelanda
- FICHA de Brasil: así juega
- ENCUESTA: ¿qué selección favorita ganará el título?
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios