La polémica persigue a Juan Román Riquelme allá por donde va. La estrella de Boca Juniors tendrá que responder ante una fiscal por incitar a la violencia después de que en el pasado Boca-Racing de Avellaneda, se encarase verbalmente y con gestos ostensibles con un aficionado de La Bombonera.
Riquelme se dirigió a este aficionado local, Agustín Pozzetti, de 21 años, que se ha convertido en un personaje famoso en Argentina después del incidente. El aficionado negó que haya insultado a Riquelme y que sólo pidió que le ponga "huevos". Poco después de su demanda, Riquelme marcó el gol de la victoria (2-1) y se dirigió a la zona donde se sienta el seguidor de Boca.
Asegura que no le insultó
El centrocampista ex del Villarreal asegura que no insultó al aficionado y considera toda esta polémica "una boludez, con todo lo que está pasando en el país" y que le "da risa que digan que tengo que ir diez días detenido".
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