El Real Madrid ganó por 1-3 al Cádiz en la final de consolación del trofeo Ramón Carranza.

Poco consuelo para un equipo del que siempre se espera más.

Y es que el Madrid sigue sin encontrar el patrón táctico: no desplegó un buen juego ante un animoso el Cádiz, que derrochó voluntad y puso en aprietos a su rival, en un partido que terminó con bronca y un expulsado por bando.

El alemán Bernd Schuster dispuso de un equipo completamente distinto al que opuso al Betis el día anterior.

Los madridistas, con Guti de organizador y el argentino Javier Saviola y Roberto Soldado como jugadores más adelantados, pusieron pronto de cara el choque, después de que el árbitro señalara como penalti una jugada en la que Saviola cayó en el área.

Soldado transformó el penalti antes de que se cumpliera el cuarto de hora de partido, algo que motivó que el equipo que entrena el ex portero y entrenador madridista Mariano García Remón tuviera una tímida reacción.

Los cadistas apretaron en el centro del campo y dispusieron de algunos acercamientos ante Dudek, pero sin ningún peligro. El Madrid controlaba el partido.

Bríos renovados

El Cádiz salió con renovados bríos en la segunda parte y pronto hizo lo que no había podido en toda la primera, hacer trabajar a Dudek, como en un remate del recién ingresado Acuña, un joven delantero paraguayo que es una de las promesas de los cadistas.

Otro de los que entraron en la segunda parte, Enrique, le dio continuidad al dominio del Cádiz y en una jugada personal, en la que se fue muy bien del central brasileño Pepe, puso el empate.

Fue el holandés Ruud Van Nistelrooy, que salió ya en la fase final del partido en sustitución de Saviola, el que a los dos minutos de su entrada consiguió de cabeza el tanto que volvió a desequilibrar el marcador.

El tanto de delantero holandés fue una acción aislada de los madridistas y que maquilló el resultado ante un Cádiz que siempre estuvo más dispuesto y con más ímpetu ante la defensa rival, aunque también siempre con poca mordiente, pocos recursos y con poca fortuna al encontrarse en más de una ocasión con los palos de la meta rival.

El gol en la prolongación de Balboa, con la colaboración del defensa Paco Vázquez, sólo fue el epílogo de un accidentado final, en el que el uruguayo Alexander Medina dio un cabezazo al portugués Pepe y se ganó la expulsión, junto al madridista Diarrá, que también intervino en la bronca.

Ficha técnica:

1 - Cádiz CF: Contreras; Vella (Chico, m.82), Miguel (Juanito, m.71), De la Cuesta, Raúl López; Cristian (Enrique, m.46), Yago, Fleurquin (José Miguel, m.46), Nano; Dani (Medina, m.71) y Gastón Casas (Acuña, m.46).

3 - Real Madrid: Dudek; Cicinho, Ramos (Pepe, m.57), Metzelder, Marcelo; Diarra, Baptista (Rubén de la Red, m.64), Robinho (Granero, m.79); Guti (Sneijder, m.72); Saviola (Van Nistelrooy, m.72) y Soldado (Balboa, m.64).

Goles: 0-1, M.14: Soldado, de penalti. 1-1, M.60: Enrique. 2-1, M.74: Van Nistelrooy. 1-3, M.92: Balboa.

Árbitro: Santana Ponce (Comité Andaluz). Expulsó al cadista Medina y al madridista Diarrá, a ambos en el minuto 90, por agresiones a contrarios. Además, mostró tarjeta amarilla a los cadistas Nano (m.28) y Miguel García (m.45).

Incidencias: Partido para decidir el tercer y cuarto puesto de la 53 edición del Torneo Ramón de Carranza, disputado en el estadio Ramón de Carranza ante unos doce mil espectadores.