Kimi Raikkonen y Daniel Ricciardo tienen coche nuevo este año. El finlandés pilota junto a Fernando Alonso en la escudería Ferrari y Daniel Ricciardo es el nuevo compañero del tetracampeón de Fórmula 1, Sebastian Vettel. Pero aunque el cambio es para ambos un 'ascenso' respecto a sus anteriores equipos, han empezado con mal pie la temporada 2014 y su situación empieza a recordar a los pilotos que los precedieron en sus actuales escuadras.

Raikkonen sólo pudo ser séptimo en Australia, si bien fue un final bastante mejor de lo esperado a la vista de su rendimiento en la calificación. El finlandés se estrenó en su primera crono del año con un choque que le obligó a salir desde la undécima posición. A pesar de recuperar varios puestos, su rendimiento no estuvo cerca del de Fernando Alonso. En Malasia, un inoportuno pinchazo tras una colisión con Kevin Magnussen arruinó su carrera y acabó decimosegundo, fuera de los puntos.

El predecesor de Raikkonen, Felipe Massa (ahora en Williams), tuvo una temporada 2013 muy discreta, con dos abandonos, un solo podio y mucha presencia de séptimos, octavos y novenos puestos. El brasileño no tuvo muchas opciones de ayudar a Alonso en sus intentos, siempre infructuosos, de poder disputarle a Vettel el título.

Precisamente el compañero de Vettel, Daniel Ricciardo, tampoco está gozando de fortuna este año. En su primera carrera, en Australia, fue descalificado tras irregularidades en su indicador de combustible. En el GP de Malasia, tuvo problemas en una parada con los neumáticos, luego con un alerón, fue sancionado y finalmente abandonó. A pesar de tener uno de los cuatro mejores coches de la parrilla, Ricciardo tiene aún su casillero a cero en el Mundial.

Por si fuera poco, ha sido sancionado con diez puestos en la salida del Gran Premio de Bahréin, que se disputa el próximo 6 de abril, tras ser multado por la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) por salir del 'pit lane' con la rueda delantera izquierda suelta.

El piloto australiano rodaba en la cuarta posición cuando tuvo que pasar por el garaje a cambiar de neumáticos. En ese momento, un fallo a la hora de colocar la tuerca de la rueda izquierda provocó que el monoplaza saliera con el neumático suelto y que se tuviera que parar pocos metros después para terminar de hacer el cambio. Durante la carrera, Ricciardo fue sancionado con una penalización de diez segundos pero fue al término de las 56 vueltas cuando la FIA decidió sancionarle con diez puestos en la parrilla de salida del próximo Gran Premio.

Su antecesor en el segundo coche Red Bull, el también australiano Mark Webber, era la cruz de su compañero Sebastian Vettel. Acostumbrado a problemas mecánicos, en 2013 sufrió tres abandonos (dos el año anterior) y pese a tener un coche muy potente, no pudo saborear las mieles del triunfo ni una sola vez.