Quique Sánchez Flores, entrenador del Atlético de Madrid, manifestó, sobre el partido que su equipo perdió contra el Aris y que le deja al borde de la eliminación europea, que "están pasando cosas muy raras" que acercan al grupo lo que sucedía la temporada pasada, cuando llegó al cargo.

"Pasan cosas muy raras. Estamos otra vez como el año pasado cuando llegué. Esa es la verdad. Pasan cosas muy raras, muy extrañas. Los jugadores lo saben, pero los delanteros miran para atrás y se preguntan qué pasa", dijo el técnico rojiblanco, en alusión a los errores defensivos de su equipo.

"Entiendo que hay jugadores que salen de lesiones y que pueden no estar bien, pero lo que está sucediendo es muy extraño", dijo el entrenador.

"Cuando nos disparamos al pie, hay que reaccionar y seguir trabajando, pero lo cierto es que los dos últimos resultados han sido dos palos muy duros", añadió.

Sobre el futuro del equipo en la competición, Quique se mostró pesimista. "No dependemos de nosotros y no confío en el Rosenborg. No me gusta crear falsas expectativas ni engañar a los aficionados. Está muy complicado.

"Es una pena que caigamos así en un competición que nos ha llevado a la gloria, pero la realidad es la que es", dijo.

"Hemos dejado escapar la oportunidad más importante y ahora está muy difícil. En el primer tiempo nos equivocamos al intentar el toque con el 2-1. En el descanso les he dicho a los jugadores que no era ese momento, que no estábamos para tonterías, pero cuando quisimos reaccionar, el Aris ya se había rearmado".

"No se ha subestimado al rival. Ha sido similar al partido de hace cuarto días. Nos hemos equivocado en a los tiempos: Hemos regalado diez minutos espantosos y nos han ganado", señaló.

"Estamos como al principio de la temporada pasada en ese sentido. Pido perdón a la afición y prometo que trabajaremos para devolverle la ilusión".