El presidente del Xerez Deportivo, Joaquín Morales, ha comenzado un encierro en el Ayuntamiento de la ciudad para demandar la subvención municipal que le corresponde al club, y que asciende a dos millones de euros.

El presidente del club líder de Segunda División ha alegado que con su encierro pretende protestar por el retraso en el cobro de la subvención municipal, que el Xerez debería haber percibido antes del 30 de junio "para liquidar la deuda de la pasada temporada".

Morales, que ha insistido en que permanecerá hasta el próximo domingo "si hace falta", informó previamente a los jugadores del club de su decisión, a los que aseguró que, en cualquier caso, les pagará la próxima semana, apuntando que ha ordenado a sus abogados que le embarguen una finca familiar para que estos cobren su nómina.

Por su parte, el delegado de Economía del Ayuntamiento de Jerez, Juan Manuel García Bermúdez, ha subrayado en rueda de prensa "que se está haciendo todo lo posible", achacando el retraso en el cobro de la subvención "a problemas con los avales bancarios".