"Pusieron fin a mi carrera", según informa 'La Gazzetta dello Sport', son las palabras que Pozzovivo le dijo por teléfono a su esposa, Valentina Conte, tras el atropello sufrido en los alrededores de la localidad italiana de Cosenza.

El ciclista fue operado la pasada noche de sus diversas lesiones. Así, los médicos le insertaron un clavo en la tibia y el peroné, le redujeron la fractura abierta en el codo y le pusieron varios puntos de sutura en la barbilla, entre otros cuidados.

"Tiene dolor, está fuera de peligro, pero la situación es grave. Esta mañana, cuando se despertó, solo me dijo: 'Déjame irme a casa'", explicó su esposa al diario italiano.

En el accidente, que está siendo investigado por la policía municipal de Cosenza, Pozzovivo fue golpeado con el lado derecho del automóvil y se rompió el parabrisas y la luna. Los médicos, que calculan que en dos semanas podrá volver a apoyar la pierna fracturada, tienen la intención de someter a Pozzovivo a nuevas pruebas médicas para verificar su estado físico más allá de las fracturas.