La Policía Nacional ha devuelto a Argentina a Maxi Mazzarro, uno de los barrabravas más peligrosos de Boca Juniors. El líder ultra obtuvo el permiso de viajar a España para el partido de vuelta en la final de la Copa Libertadores entre los xeneizes y River Plate, pero una vez que pisó el aeropuerto de Madrid Barajas, le deportaron de regreso.

A Mazzarro le detectaron dentro del dispositivo de seguridad puesto en marcha en la capital española, y la policía no dudó en ni siquiera dejarle pasar de la zona de pasaportes.

La prohibición de entrada a Mazzarro ha evitado que uno de los ultras más peligrosos del fútbol argentino entre en España, pero no es el único. La decisión de la jueza Sabrina Namer para dejar viajar tanto a él como a Rafael Di Zeo, líder de la barrabrava 'la 12', ha generado mucha polémica en Argentina, toda vez que no entienden cómo uno de los ultras más peligroso del mundo del fútbol pueda viajar a Madrid, aunque no pueda acceder al Santiago Bernabéu.

Di Zeo tiene conexiones con varios grupos radicales vinculados al fútbol en España, como es el caso de Ultra Sur, a quienes dio un curso en 2005.