Las finales de la NBA son todo un espectáculo en el que ningún detalle se deja escapar. Multitud de cámaras de televisión tratan de captar cualquier detalle y su afán por esto está poniendo en un aprieto a la Liga, que podría acabar imponiendo sanciones económicas a la cadena NBC.

Durante el cuarto partido de la serie, la estrella de los Cavaliers, Lebron James, se llevó la peor parte.

Primero, una cámara le grabó sus partes íntimas mientras el jugador se ajustaba el pantalón y la camiseta. Luego, al propio Lebron se le abría una brecha en la cabeza al chocar con un cámara situado justo tras la canasta en la que atacaba. Un choque en el aire con el pívot de los Warriors Andrew Bogut provocaba que el 23 de los Cavs saliese desequilibrado hacia la línea de fondo y se golpease bruscamente con una de las cámaras situadas cerca del parqué de juego, sufriendo un aparatoso corte.

El asunto del pene del mejor jugador del planeta ha sido portada en digitales de todo el mundo y ha provocado un agrio debate en una sociedad, la estadounidense, muy sensible a este tipo de imágenes en TV. Sin ir más lejos, The Guardian recuerda el famoso episodio entre Justin Timberlake y Janet Jackson en la Superbowl de 2004, donde la CBS acabó multada con 550.000 dólares por mostrar el pecho de la hermana de Michael Jackson. La NBC podría enfrentarse a una sanción similar.

Sobre el golpe de Lebron, lo cierto es que fueron muchos los analistas que se preguntaron en Twitter, la noche del partido, si quizá había llegado el momento de situar a los cámaras en una posición más retrasada para evitar choques (y posibles lesiones) de los jugadores.