La española Edurne Pasaban, la primera mujer que ha sido capaz de ollar los catorce 'ochomiles', las montañas más altas de la tierra, ha confesado este martes que cuando se enteró de que España había ganado el Mundial de fútbol tenía "clarísimo" que se quedaba sin el premio Príncipe de Asturias.

"Todos estamos contentos porque hayan ganado el Mundial, pero cuando lo supe tenía clarísimo que este año no íbamos a conseguir el premio", ha declarado la alpinista tolosarra, quien sin embargo ha asegurado que, para ella, "el mero hecho de estar nominada y obtener el reconocimiento de tanta gente ya es un honor".

Pasaban ha hecho estas declaraciones antes de recibir otro premio, el que otorga la asociación Sport Cultura Barcelona y que ha recibido de manos de Jordi Hereu, alcalde de la ciudad.

La montañera vasca se ha mostrado encantada con este galardón: "Una cosa es que te reconozcan en tu tierra, algo más habitual, pero éste me lo dan en Barcelona. Llevo cinco años afincada en Cataluña, me siento un poco catalana al estar tanto tiempo aquí y por eso me hace mucha ilusión".

Pasaban se convirtió hace una semanas en la primera mujer en coronar los catorce 'ochomiles', después de que ni la propia federación de alpinismo surcoreana reconociera a Oh Eun Sun la ascensión a la cima del Kangchenjunga.

Para la montañera vasca, es "una satisfacción y una tranquilidad" que finalmente se haya confirmado algo que ella y su equipo ya dijeron hace tiempo, cuando pusieron en duda la ascensión de Miss Oh a esa cima.

No entiende a la coreana

Pasaban no entiende porque la alpinista coreana sigue callada desde entonces. "Dicen que está preparando pruebas para demostrar que sí que alcanzó la cima. También se anunció que habría una rueda de prensa, pero de eso hace unas tres semanas. Si yo realmente tuviera pruebas de que he subido no las saco para mañana; ya las hubiera sacado ayer", ha comentado al respecto.

Una vez completadas las catorce cimas más altas del planeta, Edurne Pasaban se ha marcado un nuevo reto: "De los catorce 'ochomiles' sólo subí uno con oxígeno, el Everest en 2001. Así que el año que viene volveré al Everest para hacerlo sin oxígeno y quitarme ese gusanillo".

Luego, tal vez enfoque su carrera hacia otro lado. "Doy cursos de formación y conferencias de liderazgo en muchas empresas y estoy pensando un poco en ir por ahí, o por el camino de mundo del entrenamiento", ha concluido.