El Valencia acabó con la maldición de los equipos españoles en la Liga de Campeones en sus visitas a Grecia y se impuso por 2-4 al Olympiakós gracias a la eficacia de Fernando Morientes que firmó un 'hat-trick' y permitió a su equipo volver por la puerta grande a la máxima competición continental.

"Este es un buen comienzo, ilusionante y hemos tenido una muy buena respuesta. No es momento de empezar a hacer cuentas, pero es bueno empezar bien porque la moral de la tropa se refuerza", explicó el técnico valencianista Quique Sánchez Flores.

Pese al marcador final, el encuentro fue un choque de muchas alternativas, en el que el Valencia mostró algunas lagunas de concentración que le pudieron costar caro, pero a cinco minutos del final un último latigazo del conjunto español le permitió llevarse la victoria.

No arrancó bien para el Valencia, la pareja formada por Edu y Marchena sucumbió en la medular ante los centrocampistas griegos, sobre todo ante la portentosa capacidad de recuperación que mostró Stoltidis, lo que provocó que el equipo español no se encontrase cómodo sobre el irregular terreno de juego.

Sánchez Flores aseguró: "No era fácil entrar en el partido. Nos costó pero reaccionamos bien al gol ante un equipo muy anárquico, con mucha movilidad y nos acabaron provocando distancia entre nuestras líneas".

Rivaldo, el que tuvo retuvo

El conjunto heleno encontró en la banda derecha valencianista el resquicio para atacar con peligro a Cañizares y por ahí llegaron los problemas para la zaga valencianista, con los chispazos de calidad de Rivaldo, la movilidad del uruguayo Castillo y la corpulencia de Konstantinou.

Sobrepasada la media hora de juego, el Olympiakos obtuvo su premio en un gran centro de Stoltidis lo culminó Konstantinou por el palo corto.

Empuje valencianista antes del descanso

El gol de los griegos supuso un bofetón en la cara del Valencia, pero entonces apareció Edu que, junto a la pareja ofensiva valencianista, provocó el cambio de decoración del partido. La conexión de estos tres jugadores acabó con el tanto de Morientes que anotó el empate, tras una gran jugada de Villa.

Este tanto convertía al delantero español en el único jugador que ha anotado en Champions con cuatro equipos distintos .

El Olympiakós estaba grogui y el Valencia no desaprovechó la ocasión y un contragolpe de Angulo permitió al Moro aprovechar el rechace del portero para marcar su segundo tanto y permitir a su equipo marcharse al vestuario en ventaja.

Ofensiva helena

Sin embargo, en la reanudación los griegos también salieron motivados. El Olympiakós se lanzó a un ataque desesperado y poco a poco fue comiendo terreno al Valencia, hasta que el escurridizo Castillo sacó provecho de un desmarque en diagonal para batir a la media vuelta al meta español.

El conjunto heleno achuchó tras el empate, pero el Valencia mantuvo el tipo y vio como con el paso de los minutos los griegos iban perdiendo fuelle.

El partido se encaminaba hacia el final, cuando en un saque de esquina David Albiol sacó oro de una embarullada jugada en el área para marcar el 2-3, a cinco minutos del final. El OlympiakóOlympiakóss se desplomó y Morientes cabeceó, en otro saque de esquina, su tercer tanto para sentenciar el partido.

Ficha Técnica:

2. Olympiakós: Nikopolidis, Zewlakow (Pantos, m.46), Anatolakis (Julio César, m.68), Ouaddou, Domi; Stoltidis, Kafes, Castillo, Djordjevic; Konstantinou y Rivaldo.

4. Valencia: Cañizares, Miguel, Ayala, Albiol, Moretti; Angulo, Edu, Marchena, Gavilán (Silva, m.71); Villa (Regueiro, m.80) y Morientes.

Goles: 1-0, m.27 Konstantinou. 1-1, m.33 Morientes. 1-2, m.39 Morientes. 2-2, m.66 Castillo. 2-3, m.85 Albiol. 2-4, m.90 Morientes.

Árbitro: Terje Hauge (NOR). Amonestó por el Olympiacos a Ouaddou y por el Valencia a Edu y Ayala.