En el tercer turno en la Philippe-Chatrier, el balear salió como una exhalación para ponerse pronto 3-0 arriba. A pesar de ello, Londero le obligó a defenderse de hasta tres bolas de 'break', un momento de incertidumbre que el español cerró con un buen 'drive'.

Así, Nadal se encontró en el octavo juego con la primera posibilidad de abrochar el parcial, al resto; en la segunda de sus oportunidades, puso el 6-2 después de 38 minutos de juego. El buen juego del argentino entró en crisis en la segunda manga, donde no gozó de ninguna ocasión de quebrar el servicio de su rival.

El de Manacor tuvo que esperar hasta el sexto juego para lograr romper el saque de Londero, quien sobrevivió a otras dos pelotas de set pero que nada pudo hacer cuando Nadal sirvió para adjudicarse el segundo parcial.

El 4-1 con el que comenzó la tercera manga indicaba un camino plácido hacia la victoria, pero Londero resistió y respondió a la segunda rotura del balear con un 'contrabreak' que le daba vida. Con 3-4 y un 30-0 en contra con su servicio, el once veces campeón en París tuvo que tragar saliva pasa salvar el momento. Más tarde, en la primera de sus dos pelotas de partido, puso fin a la contienda en dos horas y 13 minutos.

En la lucha por alzar su duodécima 'Copa de los Mosqueteros', Nadal se cruzará en cuartos con el ganador del enfrentamiento entre Nishikori y Paire, interrumpido este mismo domingo por falta de luz natural cuando el nipón ganaba por 6-2, (8)6-7 y 6-2 tras dos horas y un minuto de disputa.

Por su parte, el suizo Roger Federer tampoco pasó apuros para lograr el pase a cuartos al derrotar al argentino Leonardo Mayer en tres sets (6-2, 6-3, 6-3). Su adversario en la siguiente ronda será el también helvético Stanislas Wawrinka, verdugo del griego Stefanos Tsitsipas en un duelo maratoniano y cuyo resultado fue 7-6(6), 5-7, 6-4, 3-6 y 8-6.