El hecho, la inspección más o menos rutinaria de la localización geográfica que acogerá unos mundiales de ciclismo, no pasaría del más puro trámite si no fuera porque  las dudas han sido compañeras de viaje habituales de la aventura mundialista de Ponferrada. Designada por la Unión Ciclista Internacional como la sede de la próxima edición de los campeonatos del mundo, el proyecto de Ponferrada necesitó de un aval de la Junta de Castilla y León para abordar los primeros plazos del cánon de cinco millones de euros que exige el máximo gobierno ciclista.

Además de la cuestión económica, con una empresa que sondea el mercado en busca de patrocinadores que hagan rentable el proyecto (de momento se han anunciado tres), Ponferrada 2014 se encontró durante su visita a los pasados Mundiales de la Toscana con algunos peros a sus recorridos propuestos.

Dos hombres de la UCI, Philippe Chevallier y Matthew Knight, inspeccionaron entre este martes y el miércoles los trazados que sugiere la organización del Mundial. Según adelantó este miércoles el Ayuntamiento de Ponferrada, los dos delegados del máximo gobierno ciclista han aprobado tanto los circuitos por los que discurrirán las pruebas en ruta como los que albergarán las contrarrelojes. Ese mensaje, al menos, han transmitido. Falta la manifestación oficial de la Unión Ciclista Internacional.

El Ayuntamiento destacó "el alto grado de colaboración y trabajo en común mantenido por el comité organizador y los representantes de la UCI, que ha permitido una rápida concreción de las propuestas presentadas por la organización del mundial". Fuentes de la organización consultadas por 20minutos disipan todas esas dudas: “Hay mundial, hay recorridos, una buena organización y muchas granas de hacer las cosas bien. Será un gran Mundial”.