La Asociación de Automovilismo de Nueva Zelanda se sumó hoy a las peticiones para que Max Mosley dimita como presidente de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), después de la emisión de un

orgía de connotaciones nazis en la que participó el mandatario inglés, quien por otra parte

declaró que no pensaba abandonar su cargo.

El director general de la asociación neozelandesa, Ross Armstrong, declaró que sería un "excelente resultado" que Mosley dimitiera antes del 3 de junio, fecha en la que la FIA celebrará una Asamblea General Extraordinaria en París, a propuesta de su todavía presidente.

"A veces es mejor irte en lugar de que te echen", afirmó Armstrong en declaraciones a Radio Nueva Zelanda, después de que la federación de su país haya optado por no invitar a Mosley a una cumbre sobre transporte y medio ambiente en el mes de junio.

La postura de Nueva Zelanda fue

secundada también por la Federación de Canadá, cuyo presidente, Tim Shearman, pidió por carta a Mosley que dimita y expresó su confianza en que "lo haga tras una consideración cuidadosa".

Las últimas palabras de apoyo a Mosley llegaron desde el

Club del Automóvil de Emiratos Árabes Unidos, cuyo presidente, Mohammed ben Sulayem, piensa que "no es aceptable" que se hayan utilizado las imágenes.

"Creo que esto se ha utilizado por razones equivocadas. Seguramente él no ha incumplido la ley. Esto es algo permitido allí. ¿Cómo podemos olvidar tan rápidamente lo que este hombre hizo por el deportes del motor?.

No ha hecho nada que debilite a la FIA. Le respaldo plenamente", señaló.