El Milan de Ronaldinho y de los grandes fichajes se hunde en lo más bajo de la clasificación tras sumar contra el Génova su segunda derrota (2-0) en el campeonato, mientras que la actuación y el tanto del argentino Mauro Zárate hace soñar a un Lazio líder en la liga.

El Génova firmó hoy la crisis del Milán de Carlo Ancelotti, que aún no ha sumado un punto en este campeonato, y sigue sin encontrar ritmo e ideas.

Ancelotti sabía que la victoria de hoy era muy importante para la moral de sus jugadores, que no han ganado aún ni los amistosos de pretemporada, y por ello contó con el ex barcelonista Ronaldinho, a pesar del cansancio por los encuentros de la semana con la selección de Brasil.

Ronaldinho avisó en los primeros minutos con un fuerte tiro desde media distancia, pero fue sólo un espejismo, porque el Génova con calma y prudencia se fue haciendo con el control del juego.

Mientras todos esperaban ver los juegos de magia de Ronaldinho, el verdadero mago fue el fichaje de última hora del Génova, "el Príncipe" Milito.

En el minuto 30, el argentino paró un balón con el pecho en medio del área que dejó a Sculli para que éste rematase prácticamente solo ante la puerta

En el segundo tiempo, Ancelotti se vio obligado a dar descanso a Ronaldinho, que sigue sin encontrar su puesto en el Milan, y a Shevchenko, y en su lugar entraron el holandés Clarence Seedorf y Marco Borriello, pero la situación no cambió.

En el minuto 69, el técnico milanista se jugó la carta del brasileño Pato, que entró en sustitución de otro de los fichajes estrellas el francés Mathieu Flamini.

El Milan seguía sin despertarse, con una defensa que no se oponía a las internadas de Milito, que volvió prácticamente locos a la retaguardia milanista, y vio premiada su insistencia al convertir (m.90) un penalti, que dejaba el marcador con un contundente 2-0.

Lazio, en forma

El Lazio se confirmó hoy como el equipo más en forma del campeonato al conseguir con un gran encuentro la victoria (2-0) ante el Sampdoria, mientras su delantero el argentino Mauro Zárate es, sin duda, el hombre del momento.

Con un impresionante tiro ajustado al larguero, Zárate inauguró el marcador en el minuto 7 y suma ya tres goles en dos encuentros.

El Nápoles se mostró, como se esperaba, un rival muy difícil para el Fiorentina, que sucumbió 2-1, en un encuentro repleto de oportunidades para ambos equipos, pero en el que se impuso la fantasía de jugadores como el argentino Ezequiel Lavezzi.

Aunque sin marcar, Lavezzi fue uno de los protagonistas del encuentro al inventarse el pase del gol del eslovaco Marek Hamsik en el minuto 48, que empató el encuentro tras el gol del rumano Adrian Mutu.

En un partido muy igualado, decidió la suerte que esta vez estaba de la parte de los de casa, que en el minuto 71 se pusieron por delante en el marcador con el gol de Maggio.

En el resto de los encuentros, el Lecce se impuso al Chievo Verona con goles de Fabio Caserta (m.2) y el argentino José Ignacio Castillo (m.80); el Bolonia perdió a manos del Atalanta (0-1); el Reggina y el Torino empataron (1-1), y el Siena se impuso (2-0) a un Cagliari, que como el Milan no ha sumado aún puntos.