Con el mercado estival de fichajes en Primera el deporte rey no deja de ser el rey de los tópicos... porque, sea quien sea el jugador, firme por el club que firme, ya sea por su peso histórico, por la oferta en cuestión o por la oportunidad en sí, la conclusión está clara: "Siempre quise jugar aquí".

La frase mágica. Tal cual la dijo en su día Cristiano Ronaldo al cambiar Manchester por Madrid. La repitió Özil al hacerlo con Bremen. Se aferró a ella, con el plus de "ser un sueño", el mexicano Javier Hernández Chicharito cuando llegó al United. Incluso el japonés Shunsuke Nakamura, al ser presentado por el RCD Espanyol, se subió al barco.

Sí, claro, hablamos de Real Madrid, Barça y Manchester, pero si el club o la competición son susceptibles de mejorar, ese "Siempre quise jugar aquí" puede mutar en un cándido beso al escudo de turno, en la defensa de que "Esta fue mi primera opción" o en la consecución de "un sueño". Esto último consideró el chileno Alexis tras llegada al Barça: "Es un sueño hecho realidad".

Todo cambio de aires conlleva una inherente felicidad. Lo resume el senegalés Ibrahima: "Estoy muy ilusionado y contento porque Osasuna es un equipo de Primera. Cualquier futbolista sueña con esta categoría". "Estoy muy contento de estar aquí, porque es un gran equipo, uno a los que no se puede decir que no", señaló ayer mismo el colombiano Zapata, un defensa presentado por el Villarreal. ¿Y si dejas el Madrid? Esto fue lo que argumentó el defensa Garay: "Estoy feliz por llegar al Benfica. No es un paso atrás, son dos ‘grandes’ con realidades distintas".

Ni una situación económica que invita a recelos quebranta los tópicos. Para muestra Mateos, central del Madrid que jugará en el Zaragoza: "Cuando me hablaron de esta opción no me lo pensé ni un momento". Eso sí, los hay más comedidos, como Damián Suárez, uruguayo del Sporting, que recurre al hincha, otro de los grandes referentes: "Este es un club muy serio, bien organizado y con una gran afición".

"Hablar de futuro es una chorrada, el día de mañana pueden cambiar tantas cosas...", indicaba Xavi Torres, del Levante... Y si no, que se lo digan al Kun Agüero.

Ciertos patrones se repiten durante la temporada. Más allá del mano a mano entre el Real Madrid y el FC Barcelona, toda Liga tiene su líder imprevisto al inicio, su equipo "sorpresa" o revelación al final y su ‘grande’ en apuros que puede reforzar el drama con un descenso. "Los árbitros son muy malos" o el "tenemos que estar unidos para sacar esto adelante", dos clásicos.