Pese a ser un país báltico donde el baloncesto se vive con pasión, pese a tener buenos jugadores, Letonia es una selección irregular a la que los resultados no suelen acompañar.

Ha estado presente en todos los europeos desde 2001.

En el Eurobasket de 2005 no pasó de la primera fase.

Su juego es inconstante: alterna fases brillantes con otras pésimas.

Abusa mucho del tiro exterior, que no siempre le funciona. Esos defectos quizá sean acahacables a su juventud.

Si tiene un día bueno, es capaz de complicarle la vida al mejor equipo.

Es una incógnita, aunque, en principio, debería ocupar el tercer puesto del grupo.

Andris Biedrins. Aunque aún no ha debutado con su selección, Biedrins es el mejor jugador letón del momento.

Juega en la NBA, en Golden State Warriors, donde sus números son notables: 14,7 minutos y 3,8 puntos por partido.

Es joven, 21 años, y aún tiene mucho que ofrecer. Mide 2,12 metros y es un pívot que brilla en tanto en ataque como en defensa, donde manifiesta un gran poder de intimidación.

Karlis Muiznieks. Entrenador joven, de 43 años, apuesta claramente por la juventud. Lleva varios años en el banquillo letón y se caracteriza por dar mucha libertad a sus jugadores.

Kristaps Valters.

Sandis Buškevics.

Janis Blums.

Raimonds Vaikulis.

Aigars Vitols.

Armands Škele.

Kristaps Janicenoks.

Sandis Valters.

Ugis Vilums.

Akselis Vairogs.

Gatis Jahovics.

Ernests Kalve.

Ivars Timermanis.

Janis Porzingis.

Pavels Veselovs.

Uvis Helmanis.

Maris Laksa.

Kaspars Berzinš.

Martinš Skirmants.

Kaspars Cipruss.

Raitis Grafs.

Andris Biedrinš.