Jason Kidd, el base titular de la selección estadounidense de Estados Unidos, se une a los que opinan que la foto de España rasgándose los ojos es racista y asegura que si ellos se hacen esa instantánea "ya nos habrían expulsado de los Juegos".

Según informa Marca, el jugador de Dallas Mavericks afirmó que si ellos se hubieran fotografiado de esa manera "por lo menos no hubiéramos podido volver a Estados Unidos. Habríamos sido suspendidos".

Kidd asegura que hay un doble rasero para medir este tipo de situaciones e incluso pide la sanción para los españoles: "En cambio a ellos no les van a hacer nada. Hay una doble forma de medir", concluye el base americano.