El 17 de junio, en Madrid, Javier Cienfuegos, Cienfu en la Universidad y en el atletismo, lanzó el martillo júnior de 6 kg a 82,97 m y estableció una nueva plusmarca mundial de la categoría. El absoluto, del soviético Yuriy Sedykh, está en 86,74 desde 1986, con el martillo de 7,260.

El lanzador pacense, de 1,93 m de altura, 137 kilos y un 47 de pie, cumple este miércoles 19 años y no siente ninguna presión: "Sigo entrenando y los resultados vendrán solos". En agosto le esperan los Mundiales de Berlín.

¿Cómo los afrontará?

Intentaré disfrutar y aprender. Quizá, de rebote, me podría meter en la final.

¿Existe el nuevo atletismo español?

Sancho, Cáceres, Bustos, Gavaldá y yo desmentimos con nuestros resultados que no haya relevo generacional.

¿Los veteranos ayudan?

Sí. Saben que si los jubilamos es por el bien de este deporte, para que siga creciendo.

¿Se le ha escapado alguna vez el martillo?

Un par de veces se ha desprendido el alambre y, si no te has roto nada, te ríes.

¿Qué es lo que echa de menos de su pueblo, Montijo?

La tranquilidad. En Madrid son todo prisas.

¿Cómo lleva el carné?

Me presento este miércoles al teórico. ¡A ver si es mi regalo de cumpleaños!

¿Tiene ya pensado el coche que se comprará?

Uno grande. El único en el que entro bien es en un 4x4.

¿Estudia?

Este año he empezado Fisioterapia. Si quieres llevar atletismo y estudios bien, ninguna te saldrá bien.

¿Le molesta que sólo le vean como grande y bruto?

Cuando le das un martillo a alguien se da cuenta de lo importante que es la técnica.

¿Hace dieta?

No. Controlo lo que como. El que es grande es grande no porque coma más o menos.

¿Cómo celebrará su cumpleaños?

Vendrán mis padres del pueblo y comeremos juntos.

¿Se irás de vacaciones?

Después del Mundial. Primero, al pueblo y, luego, a Fuerteventura, a no hacer nada.