El Dakar 2008 dará su salida oficial el próximo sábado desde Lisboa, pero para los pilotos la prueba comenzó, verdaderamente, ayer con tres jornadas de verificaciones, en las que tendrán que demostrar que cumplen con todos los requisitos para afrontar el raid más duro del mundo.

Desde la capital lusa, el granadino Miguel Puertas, comandante del Ejército del Aire y piloto del equipo Combat-Soldados.com, que afronta con su KTM su quinto Dakar, cuenta a 20 minutos cómo es esta especie de ITV: «Es un coñazo. Hay más colas y más vehículos que en la ITV, pero también es el día del reencuentro con compañeros que no ves desde hace un año».

La espera es larga. «Me he tirado más de seis horas para pasar las verificaciones. Estaba citado a las 11.15 y acabo de terminar, y son las 17.45».

Por cada control técnico o administrativo, los pilotos reciben un sello «que, al final, si todo es correcto, deben ser, en total, unos 30 ó 35. Cuando dan el OK, te entregan el dorsal –el mío es el 51–, las pegatinas oficiales y se llevan la moto al parque cerrado». Allí no podrá entrar nadie hasta 15 minutos antes de comenzar el Dakar, «para evitar trucajes y modificaciones».

El precio por participar

Miguel Puertas ha tenido que pagar 50.000 euros por gastos de inscripción y el precio de su moto asciende hasta los 24.000. Además, la equipación ronda los 5.000 euros. «Lo más caro son las rodilleras, 1.000 cada una, porque te las hacen a medida».