El mercado de fichajes cerró el 31 de agosto a las 0:00h, y entre los nuevos inscritos no estaba Isaac Cuenca, pese a que tenía todo pactado con el Reus. Así lo ha denunciado públicamente el que fuera gran esperanza de la cantera del Barcelona, y que se acabó diluyendo, en su cuenta de twitter.

"Ayer (viernes) se cerró el mercado para aquellos jugadores que tenían contrato con algún otro club. En mi caso, resolví el mío con el Beer Sheva de Israel, renunciando a ofertas interesantes para volver a España. Decidí aceptar la propuesta del Reus Deportivo, porque es el club de mi ciudad natal y, además, quería jugar en casa después de algún tiempo fuera y así poder reencontrarme con un fútbol de máximo nivel, como es el español. Mi sorpresa fue que a pesar de los esfuerzos del club, La Liga se negó a inscribirme bajo el argumento de que mi caché, independientemente de lo que pactara con el club, estaba muy por encima de lo que se establecía en el contrato. Es decir, no se lo creían. Acepté las mismas condiciones económicas que los otros jugadores que sí inscribieron, pero en mi caso LaLiga no actuó de la misma manera. Seguiré trabajando para jugar en España", dijo Cuenca.

La denuncia de Cuenca ha dejado sin palabras a la afición del Reus, club con el que incluso llegó a participar en la pretemporada. El delantero lleva varios años pululando por el fútbol internacional, tras dejar la disciplina del Barcelona en la 2011-12. Ajax, Deportivo, Bursaspor, Granada y Beer Sheva le han permitido ganar experiencia y, por eso, aceptó la propuesta del Reus, su ciudad natal y un conjunto que aspira a quedarse en zona media de la tabla de Segunda División o, incluso, optar al ascenso.

Ahora se queda en tierra de nadie. Cuenca había rescindido su contrato con el equipo israelí, por lo que tendrá que buscarse un destino si quiere seguir en el fútbol. La pasada temporada ganó la Supercopa de Israel y la Liga Premier.