El piloto británico Lewis Hamilton se ha unido este domingo al selecto grupo de tetracampeones del mundo de Fórmula 1, un reducido elenco de privilegiados que hasta ahora solo estaba formado por Alain Prost y Sebastian Vettel. Por delante de ellos solo hay dos pilotos con más campeonatos del mundo en su palmarés: Juan Manuel Fangio (5) y Michael Schumacher (7).

Pero Hamilton es, junto a Vettel, el único que sigue en activo y, con 32 años, tiene todavía una larga carrera por delante y la oportunidad de pulverizar todos los récords de la categoría reina del automovilismo.

Algunos ya ha comenzado a destrozarlos. Esta temporada, por ejemplo, se ha convertido en el mejor 'poleman' de la historia al batir las marcas de dos mitos de la Fórmula 1 como Ayrton Senna (65) y Michael Schumacher (68).

En Bakú superó las poles de Ayrton Senna y en Monza batió las de Michael SchumacherEn el GP de Azerbaiyán, en junio, superó la marca del fallecido genio brasileño al firmar en Bakú su pole número 66. Y en el GP de Italia batió también el récord de Schumacher.

Actualmente Hamilton atesora ya 72 poles que lo sitúan como el mejor calificador de la historia de la Fórmula 1, el piloto más rápido a una vuelta jamás visto.

Pero el británico de Mercedes también quiere ser el mejor piloto en carrera y persigue, cada vez más de cerca, el récord de 91 victorias logrado por Schumacher. Con 62 triunfos en su haber, solo le faltan 29 para dar caza al registro del káiser, algo que parecía inalcanzable.

Hamilton también ostenta el récord de puntos (2.580), por delante de Sebastian Vettel (2.385) y de Fernando Alonso (1.843). Es, además, el segundo piloto con más podios (116), solo por detrás de Schumacher (155).

En cuanto a vueltas rápidas, Lewis todavía tiene que aplicarse un poco porque ocupa la cuarta posición en el ranking histórico (38), por detrás de Alain Prost (41), Kimi Raikkonen (45) y Michael Schumacher (77).

Nacido en Stevenage, una pequeña ciudad al norte de Londres, en el seno de una familia humilde, un apunte que siempre le gusta recordar, Lewis Hamilton se inició en el karting a los 8 años y muy pronto empezó a destacar.

Cuando tenía 10 años y ya había ganado el campeonato británico tuvo la suerte de conocer a Ron Dennis, entonces patrón de McLaren, a quién se acercó para pedirle un autógrafo. Y, de paso, le mandó un mensaje premonitorio. "Algún día pilotaré uno de tus coches", le dijo.

A Dennis le sorprendió el desparpajo del pequeño Hamilton y le dijo que le llamara por teléfono dentro de unos años para negociarlo. Pero no hizo falta: fue el propio Dennis quién le llamó para ofrecerle un contrato en 1997, cuando Hamilton era una jovencísima promesa de 12 años.

A partir de entonces, bajo el paraguas de McLaren, la carrera de Hamilton fue meteórica y poco a poco fue quemando etapas hasta que debutó en la Fórmula 1 en 2007, como compañero de Fernando Alonso, y con 22 años.

Tumultuosa como pocas fue aquella temporada en la que el novato Lewis plantó cara al bicampeón español y se quedó a un punto de ser campeón del mundo, título que al final fue para Raikkonen.

Hamilton se desquitó al año siguiente, ya sin Alonso en el equipo, al lograr con McLaren su primer título de campeón del mundo (2008) en un final de infarto que no se decidió hasta las últimas vueltas de la última carrera.

Lewis continuó en la escudería de Woking hasta 2012, sin apenas opciones de volver a ser campeón, y en 2013 sorprendió al embarcarse en una nueva aventura junto al equipo Mercedes.

Aunque en ese momento pocos entendieron el cambio de equipo (entonces Mercedes aún no había ganado nada), el tiempo le ha acabado dando la razón.

A partir de 2014, Mercedes se convirtió en la escudería puntera de la Fórmula 1, la que todavía sigue marcando los tiempos, y Hamilton no ha desaprovechado la oportunidad para ampliar su palmarés con tres campeonatos más: 2014, 2015 y 2017.