El Barcelona no estuvo muy acertado en su trofeo, el Joan Gamper, en el que perdió ante el Manchester City (0-1). Tras el encuentro, el entrenador Pep Guardiola reclamó mucha paciencia con la nueva incorporación, Zlatan Ibrahimovic. El jugador sueco participó en la segunda parte, debutando con la entidad azulgrana, a la que llegó a finales de julio.

"Ibra lo va a coger rápido", señaló para referirse a que el nuevo ariete barcelonista adquirirá rápidamente los automatismos para entenderse con el argentino Lionel Messi. Ambos salieron en la segunda parte pero no combinaron en muchas acciones.

"Tengo que darle minutos a Ibrahimovic. Le hace falta continuidad y ya veremos si juega el domingo (vuelta de la Supercopa de España contra el Athletic Club). Tiene que encontrarse con sus compañeros, pero hoy estoy contento de cómo lo ha hecho", reflexionó el preparador del Barça.

Del choque contra el Manchester City, que ha representado la primera derrota del Barça en la pretemporada (0-1), Guardiola ha asegurado que su objetivo era "ganar el partido y el trofeo (Gamper)", pero ha indicado que lo que ha buscado con alineaciones cargadas de juveniles era "no cargar de minutos a los jugadores", por la proximidad del partido de la Supercopa contra el Athletic el domingo.

Josep Guardiola evitó referirse al estado del césped del Camp Nou, recientemente replantado, aunque se ha atrevido a compararlo con el año anterior a estas alturas, al subrayar que antes estaba "mejor", y cree que las deficiencias que se han manifestado podrían ser debidas a la invasión de campo que hubo en la presentación de Ibrahimovic.