El entrenador del FC Barcelona, Pep Guardiola, ha advertido del peligro del último partido de la primera fase de la Liga de Campeones, que los culés disputarán este miércoles en Kiev ante el Dinamo, pese a que un empate e incluso una derrota por la mínima les serviría para clasificarse para octavos de final.

"No podemos dejar de ser lo que somos", manifestó Guardiola en Kiev, convencido de que su equipo está obligado a "mantener la predisposición a hacer goles porque marcando, tendríamos la clasificación muy cerca".

El técnico azulgrana recalcó la importancia de liderar el grupo para disfrutar de la ventaja del factor campo en los octavos de final y repitió su mensaje a la plantilla: "Si vamos con la idea de que nos sirve el 0-1, perderemos por tres o cuatro goles de diferencia. No me sale transmitir a mis jugadores que con el 0-1 ya estamos".

Fiel a su estilo, Guardiola alabó algunos detalles del equipo rival, entre ellos su palmarés ("volverán a ganar la Liga") y su capacidad para utilizar el contragolpe. "Tiran muy bien la estrategia, aunque en defensa tienen comportamientos muy individuales, muy personales. Y físicamente son muy fuertes", añadió el preparador catalán ante los medios en el estadio del Dinamo.

Por ello, instó a su equipo a "dominar a través de la pelota" y advirtió de que en el mes de diciembre "nunca ganas la Champions, pero sí que puedes perderla".

Guardiola explicó que también ha dedicado tiempo a estudiar al rival con el objetivo de "adivinar cómo les podemos hacer daño" y recordó que un 2-0 a favor del Dinamo de Kiev "nos dejaría fuera, pero en cambio, un gol nuestro, muy cerca".