La esperanza que tenían los Rockets de Houston de conseguir el pívot español Marc Gasol se desvaneció cuando el presidente de los Grizzlies de Memphis, Michael Heisley, dijo que tenían todo listo para ofrecerle un contrato multimillonario.

Heisley declaró a varios medios de comunicación locales que la oferta de los Rockets por Gasol de cuatro años y 55 millones de dólares, no sólo la iban a igualar, sino que sus planes era superarla.

Según el periódico local "The Commercial Appeal", Gasol y los Grizzlies han llegado a un acuerdo de principio para firmar un contrato por cuatro años y 58 millones de dólares.

Aunque los Grizzlies tienen desde el domingo tres días para igualar la oferta que han hecho los Rockets a Marc Gasol, de acuerdo a Heisley el equipo de Memphis ya tenía tomada una decisión sobre su futuro y se lo había hecho saber tanto al jugador español como a su agente, Arn Tellem.

Heisley dijo que la oferta de los Grizzlies a Gasol es de un contrato de larga duración que supera en dinero a lo que le daban los Rockets y por lo tanto la continuidad del pívot catalán en Memphis está asegurada. "Vamos a quedarnos con Marc (Gasol)", declaró Heisley. "No podemos permitir que se vaya, aunque como es lógico Marc y su agente tendrán que decidir lo que desean hacer, pero aceptaremos las ofertas que le puedan hacer el resto de los equipos".

Los Rockets querían comprobar si los Grizzlies iban a responder a la oferta por Gasol con un contrato multimillonario después de tener ya comprometidos 82 millones y 71 millones de dólares por los aleros Rudy Gay y Zach Randolph, respectivamente.

Además de tener que pagar también 45 millones al base Mike Conley. Todo ello significa que si le dan a Gasol otro contrato multimillonario van a estar por encima del tope salarial, algo que augura más pérdidas económicas para un equipo que no tiene, principio, opciones de estar entre los favoritos a luchar por el título de conferencia o de liga.

El objetivo de los Grizzlies ahora es tratar de sacar de la plantilla al escolta O.J.Mayo, que podría ser enviado a los Pacers de Indiana, y recibir a Josh McRoberts.

Mientras, los Rockets, tras el nuevo "fracaso" por conseguir a uno de los hermanos Gasol, no pudieron conseguir a Pau Gasol al fallar el traspaso de Chris Paul, de los Hornets de Nueva Orleans, a los Lakers de Los Ángeles, siguen poder contar con un pívot de calidad.

Además, los Rockets se han convertido en el equipo que más ha perdido con el veto al traspaso de Paul a los Lakers, dado que no ha conseguido al jugador que iba a establecer de franquicia, ha dejado "desmoralizada" a la plantilla y sin dinero en el tope salarial para hacer un fichaje de calidad.

Por otro lado, los Clippers de Los Ángeles, el último equipo que estaba interesado en conseguir a Chris Paul, decidió retirarse de la puja por lo mucho que piden los Hornets de Nueva Orleans. Los Clippers reconocieron el gran valor que tiene Paul, pero consideraron que las pretensiones que tienen los Hornets para cerrar su traspaso son demasiado altas.

El comisionado de la NBA, David Stern, ya vetó el acuerdo de traspaso que lograron los Lakers de Los Ángeles, que ofrecían al alero Lamar Odom y al ala-pívot español Pau Gasol, que luego iba a ser enviado a los Rockets de Houston por el argentino Luis Scola, Kevin Martin y el esloveno Goran Dragic, más los derechos de una primera selección en el 2012.

El gerente general de los Lakers de Los Ángeles, Mitch Kupchak, reconoció que el equipo había sufrido un gran "descalabro" al fracasar el traspaso del base Chris Paul y que el alero Lamar Odom se negara en rotundo a seguir dentro de la franquicia.

Los Hornets querían al base Eric Gordon, al pívot Chris Kaman y a los prospectos Al-Farouq Aminu y Eric Bledsoe, además de el derecho de selección de la primera ronda del sorteo del 2012 que tienen los Clippers de los Timberwolves de Minnesota.

Los Clippers después de analizar la petición de los Hornets decidieron que no les interesaba la llegada de Paul, que además no se comprometía a firmar un contrato de larga duración y lo máximo que accedía era a quedarse la temporada del 2012-13 con el equipo, rechazando la opción de convertirse en agente libre el próximo verano.

Paul se habría comprometido a jugar dos temporadas con el ala-pívot Blake Griffin para ver cual era el rendimiento del equipo y luego tal vez firmar un contrato de larga duración, pero sin ofrecer ninguna garantía a los Clippers.