La mala suerte se cebó con Sebastian Vettel en el Gran Premio de Abu Dabi, pero solo al principio. El alemán, líder del Mundial, perdió el alerón delantero cuando apenas se habían disputado tres vueltas. Sin embargo, después de varios problemas durante el safety-car y un adelantamiento a Grosjean, Vettel siguió dejando rivales detrás para luchar por el podio.

Más tarde, cuando el alemán luchaba por meterse entre los tres pilotos más rápidos, un accidente de su compañero Webber le devolvía las opciones de luchar por la victoria con un safety-car.

En ese mismo intante las cámaras buscaban a otro de los protagonistas de la jornada, Sebastian Vettel, que salía desde el pit-lane por sanción. El alemán comenzó a recuperar posiciones, cuando se encontró con la pérdida de su alerón. Aún así, el líder del Mundial siguió con su remontada.