El partido que la Juventus disputó frente al combinado surcoreano en Seúl sigue dando que hablar. El encuentro, que estuvo marcado por la celebración de un jugador del equipo de la K-League imitando a Cristiano Ronaldo en su cara, provocó el malestar de la asociación de fútbol de ese país contra el conjunto transalpino por no haber sacado a Ronaldo al campo.

El amistoso, que finalizó con un resultado de 3-3, parecía estar gafado desde antes incluso que empezara a rodar el balón, ya que el retraso del vuelo que el equipo italiano tomó en China para desplazarse hasta la capital coreana provocó también una importante demora en el inicio del partido.

El retraso del vuelo, unido al intenso tráfico de Seúl, hizo que el encuentro comenzara casi una hora más tarde de lo programado, ante 63.000 espectadores que no tuvieron otro remedio que esperar.

Cristiano Ronaldo no disputó ni un minuto del partido, pese a que la K-League firmó un acuerdo con la Juve por el que el portugués debía jugar al menos 45 minutos. No cumplir esta condición provocó el enfado de la asociación rectora del fútbol surcoreano, que envió una nota de protesta al conjunto bianconero por haber roto el contrato, según la agencia local Yonhap.

El escrito de la K-League, que se disculpó ante sus aficionados tras el partido, reprocha a la Juventus la "arrogancia" y la "irresponsabilidad" del club italiano "antes y después" del partido.

El equipo italiano aseguró a los organizadores que la ausencia de la estrella portuguesa se debía a la "condición física" del futbolista, a quien el entrenador Maurizio Sarri defendió en rueda de prensa al asegurar que sufría un problema muscular no precisado.