El Mundial de Fórmula 1 se pone en marcha este fin de semana con la disputa del GP de Australia, una carrera inaugural que servirá para calibrar dónde se encuentra realmente cada escudería. Desde McLaren esperan pasar página a la infernal temporada que vivieron en 2015, aunque Fernando Alonso, muy prudente, no se atreve a realizar ninguna predicción.

"No podemos realizar pronósticos o hacer comparaciones ya que no sabemos mucho después de los tests de invierno. Los mismos equipos del año pasado parece que serán fuertes este año, pero todos tienen sus cartas escondidas, así que será interesante ver cómo se desarrolla el fin de semana. Solo el domingo por la tarde podremos ver dónde nos encontramos realmente. El viernes y sábado estaremos trabajando duro centrados en configurar el coche con la última especificación", ha afirmado el piloto asturiano.

Alonso también ha expresado su deseo de empezar a pilotar en el circuito de Albert Park: "Ha sido un invierno muy largo, el más largo que yo recuerde sin Fórmula 1, así que estoy con muchas ganas de volver al coche. Este trazado siempre es divertido, sobre todo porque es urbano, con sus ajustadas vías de escape, superficie bacheada y poco agarre".

Sobre el nuevo formato de calificación por eliminación, Fernando ha comentado que hará que sea una sesión más "impredecible" que la temporada pasada: "El nuevo formato hará que las cosas sean más impredecibles para los equipos y aficionados, ya que cada vez que se introduce un reglamento nuevo, pasa un tiempo hasta que te acostumbras".

También ha destacado el bicampeón español la importancia de los neumáticos y la evolución de la pista australiana a lo largo del fin de semana: "Normalmente, las condiciones de la pista cambian drásticamente desde el inicio de los Libres 1 del viernes hasta el final del Gran Premio, así que supone un reto para pilotos e ingenieros a la hora de tener la puesta a punto adecuada del coche. Este año será interesante ver cómo afectan las elecciones de neumáticos y la estrategia de cada equipo".

El compañero de Alonso en McLaren, Jenson Button, ha confirmado que el MP4-31 estrenará  en Australia mejoras que no se vieron en los test de Montmeló. "Tenemos planeado llevar evoluciones a esta carrera, así que trabajaremos para configurarlas desde los Libres1. Estamos trabajando duro entre bastidores para desarrollar el coche y traer nuevas evoluciones siempre que podamos".

El inglés ha destacado el buen comportamiento del coche en los test de pretemporada: "Melbourne será un reto para nosotros, pero sentimos que nuestro paquete es un paso adelante con respecto al año pasado".

Sobre el circuito de Albert Park, Button ha comentado que es uno de los más atractivos para pilotar, aunque es complicado para los monoplazas: "Es un sitio complicado para empezar la temporada ya que es un circuito urbano técnico, bacheado y que no perdona, así que te hace espabilar después de varios meses sin competir, pero por eso nos encanta pilotar aquí".