Luis aseguró que fue "algo normal en el fútbol que se ha exagerado mucho".

"Fue una disputa por un balón que acabó en empujones, pero nada más. Todos queremos ganar y a veces en el fútbol suceden estas cosas. No creo que el incidente fuera tan importante como para tomar una determinación drástica. Son simples calentones", comentó Aragonés minutos antes de que la selección española emprendiera viaje a Rímini para el partido del miércoles contra San Marino.

"¿Por qué no hablé con ellos en el campo?. ¿Para qué, para dar más espectáculo? Lo hice donde lo debía hacer. Lo arreglamos en nuestra cocina. En el equipo no se le ha dado la importancia que vosotros le habéis dado. No sé si se dieron un abrazo pero se dijeron que no tenía ninguna importancia y para mí eso es lo mismo que si se dieran un abrazo", añadió el seleccionador.

Aragonés negó que los jugadores españoles estén nerviosos: "después de ganar en Bruselas (0-2) se han tranquilizado mucho porque ya no hay tanta presión".

Con respecto a la alineación que utilizará este miércoles contra San Marino, el seleccionador dijo que no lo tiene "muy claro todavía" y que sólo resolverá sus dudas "cuando termine el último entrenamiento".

Aragonés salió en defensa del equipo nacional. "Llevamos bastante tiempo sin perder. No seremos tan blanditos y tan malos".

También fue interrogado sobre las declaraciones del ex seleccionador Javier Clemente, según el cual su selección "era más fuerte" que la actual.

"No quiero entrar en el tema de Mourinho", comentó Aragonés, e inmediatamente corrigió, entre sonrisas: "perdonad, ha sido un lapsus. No voy a opinar. Cada uno piensa lo que quiere".

Por último, Aragonés felicitó a Raúl por llegar a su partido número 90 con la selección. "Me alegro por la selección y por Raúl, por su comportamiento y su rendimiento".