La selección española de balonmano se clasificó para el Europeo de Serbia 2012 al imponerse por 17-26 a Lituania, gracias a las rápidas transiciones culminadas con rapidez en la segunda parte, ya que en la mitad inicial los de Valero Rivera tuvieron dificultades para superar la contundente defensa lituana.

España no se encontró cómoda en ataque en el Siemens Arena, pero apeló a la que está siendo su seña de identidad, la defensa, para frenar a los locales, que no fueron tan impetuosos como se esperaba. Así, con los errores primando por los aciertos en ambos combinados, la mayor calidad española fue decisiva para abrir brecha.

Los de Valero Rivera no conseguían superar la defensa lituana, salvo gracias a sus extremos, que bien al contragolpe, o bien desde su posición, se convertían en los únicos en batir con cierta asiduidad a un inspirado Pazemeckas, el mejor de los suyos.

Lituania no podía con la defensa visitante y demostraba que el ataque no es su mejor faceta. De este modo, poco a poco y sin un juego excesivamente brillante, la selección se marchó en el marcador, alcanzando el descanso con una cómoda renta de cinco goles (6-11).

Los problemas en ataque de los lituanos se alargaron al inicio de la segunda mitad, aunque el actual bronce olímpico y mundial no acertó a sacar provecho, encontrándose nuevamente con dificultades para hacer gol. De todos modos, la superioridad seguía siendo clara a favor de los de Valero Rivera, que mandaban en el electrónico con tranquilidad y alcanzaban los ocho goles de diferencia (8-16, min.41).

España continuó manteniendo cómodas diferencias (11-20 min.50) y realizó momentos de buen juego. El 17-26 final reflejó la superioridad española, que asegura su clasificación para el Europeo de Serbia del próximo verano.