El fútbol belga se ha visto este miércoles golpeado por un escándalo que implica a varios agentes de jugadores, entrenadores y periodistas deportivos a los que se investiga por corrupción, blanqueo de dinero y posible amaño de partidos, tal y como ha informado el diario L'Echo.

La Fiscalía ha ordenado 44 registros en el país así como 13 más en Francia, Serbia, Macedonia y Luxemburgo en busca de pruebas que acrediten la sospecha, que supondría un escándalo sin precedentes.

Entre los investigados se encuentra Ivan Leko, entrenador del Brujas, rival del Atlético de Madrid en la fase de grupos de la Champions League, así como el agente de Thibaut Courtois, Christophe Henrotay. Se ha procedido a las detenciones para llevar a cabo los correspondientes interrogatorios para tratar de esclarecer el asunto.

Las sedes de equipos como el citado Brujas, el Anderlecht o el Standard de Lieja han sido registradas a lo largo de este miércoles.

Es el resultado de más de un año de investigación que comenzó por la detección de transacciones sospechosas por parte de la Unidad de delitos deportivos de la Policía Federal.

El administrador delegado de la liga belga, Pierre François, pidió más tiempo y datos antes de declarar sobre el escándalo aunque aseguró que es "muy preocupante" para la imagen de su fútbol.